
Que tal?
Mucha gente la conoce como una excelente compañera y nadadora pero ahora se le conoce aún más por su logro del Record Mundial de Relevo Mexicano del Cruce Doble del Canal de la Mancha.
Su primer Nado en Aguas Abiertas es dentro de ésta experiencia a la cual fue invitada primeramente como suplente del relevo.
Ana Paula me cuenta que ésta experiencia de nado le ha dado grandes conocimientos ya que empieza su carrera con un reto muy importante y complejo pero cobijada bajo grandes compañeras y nadadoras a la vez.
Algo que me llamó mucha la atención es que cuando ella es invitada a participar como suplente del relevo en Diciembre y acepta el reto, ella comienza su entrenamiento desde entonces con la mentalidad de que "podía ser titular del relevo y tenía que estar bien preparada". Cuando le avisan que otra nadadora le cedía su lugar como titular en Abril, ella ya llevaba entrenando muy comprometida con el proyecto 4 meses! Según sus palabras dice: "pues ya sea suplente o titular estar preparada para lo que fuera"! Es un aliciente encontrar una joven que cuando se compromete lo hace de corazón y tomando en cuenta al equipo de trabajo y nadadoras con las cuales ya había formalizado dicho nado.
Saben cual fue la prueba por la cual la aceptan dentro del relevo como titular para el viaje??Nadar en la Laguna de Alchichica a 16° tres horas continuas! Claro habrá algunos que se pregunten porque éste tipo de pruebas, pues bueno me comentó que era una prueba básicamente para evaluar como reaccionaba su cuerpo al nado en agua fría a una distancia considerable. El cuidado meticuloso en la integridad de las nadadoras era primordial y ésta evaluación les daba a todas las certeza de una buena aclimatación por parte de Ana Paula al nado ya allá en el Canal de la Mancha.
Cuando le pregunté que le había motivado durante los entrenamientos me dio como respuesta de que fue una de las etapas más difíciles el entrenar sola. Claro pues de ahí necesitas contar con una gran capacidad de análisis, de crítica, de compromiso y contar con objetivos bien establecidos, cualidades que encontramos en Ana Paula ya que los que tuvimos la oportunidad de verla entrenar en la alberca de nuestro club, podíamos ver que siempre lo hacía con la seriedad y responsabilidad que ella misma se impuso desde el comienzo de esta aventura única.
Me comenta que la motivación, ya durante el cruce, fue el apoyo de las compañeras desde la lancha y el saber que había ido con la preparación necesaria para realizar una excelente actuación.Le pregunté sobre que fue lo más significativo que había aprendido durante el cruce y su respuesta fue: "el trabajo en equipo". Resume "éramos seis mujeres comprometidas en una meta, seis mundos distintos pero todas con el mismo fin y sin olvidar que el mar es impredecible".
Aqui con Paty Kohlmann otra nadadora.
Además de haber aprendido a adaptarse al nado en aguas abiertas con una temperatura muy baja en el agua y por un período largo de tiempo.
Me dijo que lo que de ahora en adelante evitará en sus próximos proyectos es la frustración. Cuando me relata sus dudas que tuvo sobre el hecho de entrenar sola, del cansancio que sentía, de la recuperación del esfuerzo físico y mental, lo único que puedo sacar como conclusión es que ella se avocará a los pensamientos positivos, a los objetivos reales y dejará a un lado las dudas ya que percibió que eran infundadas y de nada sirven cuando uno sabe que está bien preparado y comprometido con su meta.
"Ya llegamos" "Lo logramos"!
Y a la pregunta...que sigue? Pues sabrán que una triunfadora tiene ya en mente "lo que sigue" que es terminar su carrera, un proyecto de psicología clínica muy interesante en su facultad, seguir entrenando y a lo mejor la veremos realizar un cruce para dentro de dos o tres años más. Enhorabuena y gracias por esta satisfacción que nos das y por ser un excelente ejemplo para nuestros jóvenes y niños acerca del tesón, compromiso, responsabilidad y madurez.
Publicado en el Boletin del Club Alemán de México.
Cuando hablamos de deporte, generalmente nos referimos a los errores cometidos por nuestro equipo favorito, por nuestra estrella en la tv o por nuestro hijo para describir cómo se desarrollo el encuentro.
Así también escuchamos a muchos de nuestros jóvenes tenistas hablar primero acerca de sus errores dentro del partido para analizarlo o para dar sentido al score.
Al ubicar al error en un papel primordial dentro del partido, la gran mayoría de nuestros pequeños entran a la cancha esperando no cometerlo, buscando el juego “perfecto”, cuidando tanto tus tiros para no fallar que se olvidan simplemente de jugar.
Además se olvidan de algo muy valioso que pueden hacer dentro de la cancha y que los fortalece mental y tenisticamente hablando....intentar corregir el error.
He visto, desafortunadamente, cómo muchos pequeñitos, y no tan pequeños, sufren dentro del partido después de haber cometido un error. Entiendo perfectamente toda la gama de emociones que se llegan a sentir después de haber fallado una bola, un remate, haber cometido una doble falta en set point a favor, etc. Pero estoy convencida que podemos cambiar la intensidad de estos sentimientos con el fin de no perjudicar el progreso del partido.
Sé que no es fácil cambiar un punto de vista tan arraigado de la noche a la mañana, pero que tal si comenzamos a enseñarle a nuestro hijo que el cometer un error es parte del juego?
Que tal si le enseñamos que la importancia radica no en evitar cometer un error si no en aprender a corregirlos a tiempo dentro del partido?
Creo que así le quitaremos un peso de encima y le ayudaremos a analizar su juego mientras lo esta jugando y a que tome las decisiones adecuadas dentro del mismo.
Ahora bien les diré que nosotros como padres, entrenadores, psicólogos, preparadores físicos, etc., somos los que podemos incidir en una mentalidad distinta en cada tenista que tenemos, en cada pequeño con el que tenemos el honor de trabajar, en cada joven que atiende a nuestras clases.
Necesitamos inculcar el gusto por el reto, por el trabajo, la atención a las instrucciones y el aprender a corregir lo que hagamos mal.
Déjenme decirles que me siento honrada al tener como alumnos a dos ejemplos de esto que les comento. Ellos me han ayudado a ratificar mi búsqueda por una mentalidad de retos, de esfuerzo y de placer al jugar un partido.
Se llaman Maria Fernanda Villegas Meza de 6 añitos y Javier Rosas Acosta de 8 años ambos alumnos del CRE.
Este artículo surgió a raíz de una pregunta que les formulé: que es para ustedes un error dentro del partido o de la clase de tenis? Y esto me han respondido:
1.- “Pues aprendes de él”
2.- “Le echas más ganas a la siguiente bola”
3.- “Pienso que voy a corregir la próxima vez”
4.-“Sé que por eso no soy un perdedor”
5.-"El profesor te enseña a mejorar y te ayuda".
Ahora ustedes que opinan. Verdad que vale la pena incidir en éste tipo de pensamientos desde éstas edades o demostrarles a los mayores otra faceta del deporte?
Hay que buscar generar guerreros dentro y fuera de la cancha, personas que se sientan seguras de si mismas y que aprendan a corregir un error y a aprender de él.
Solo así empezaremos a tener más triunfadores entre nosotros sin importar sus edades ni niveles tenísticos....
Publicado en: www.atdf.com.mx