miércoles, 8 de diciembre de 2004

La violencia en el deporte...


A raíz de los violentos sucesos que se han suscitado últimamente en el deporte, considero necesario hacer una profunda reflexión y “poner manos a la obra” aquellos que tenemos la dicha de trabajar junto a jóvenes deportistas.
El lunes siguiente después de las batallas campales escenificadas, en ésta ocasión, por jugadores de la NBA y por jugadores de fútbol americano colegial, el tema fue platicado con algunos de los jóvenes tenistas con los cuales trabajo el aspecto mental para la mejora de su rendimiento deportivo.
Hubo algunos que no le dieron mucha importancia al suceso, es más lo comentaron como algo cotidiano pues se han presentado casos similares en diversos deportes a lo largo del mundo en las últimas fechas.
Estuvieron otros que se mostraron más interesados y que me contaron haber visto la noticia en la TV. Pero, tristemente, también lo contaron como algo cotidiano.
Solamente uno de ellos me refirió haber visto la noticia antes de salir al colegio y que le había parecido un hecho desagradable.
Este pequeño se mostró indignado al respecto y molesto me dijo que no entendía porque se presentaban estas situaciones si el deporte se había desarrollado como un medio de distracción, convivencia y sana competencia.
Charlé muy a gusto con él sobre la importancia de mantener el orden de las prioridades dentro del deporte y que ése cuidado lo debemos de tener todos los que estamos involucrados en él.
Debo de sentirme aliviada que hubo una respuesta, a mi parecer adecuada, a los hechos violentos que se suscitaron... pero fue de la minoría de los jóvenes encuestados.
Así que ahora me siento más comprometida en continuar trabajando y sensibilizando a los que me rodean dentro del deporte para que nunca olvidemos de que se trata éste y busquemos propiciar en nuestros niños y jóvenes el respeto, el fair-play y la esencia misma de la practica deportiva.
Por cierto permítanme felicitar a este joven tenista que entiende bien de que se trata el competir y el convivir, gracias Gonzalo Lima del CRE.
Publicado en:
www.atdf.com.mx

martes, 23 de noviembre de 2004


Dentro del deporte, bajo ninguna condición, la violencia por parte de los atletas o por parte de los aficionados debe estar justificada... Posted by Hello

martes, 16 de noviembre de 2004


Modelos a seguir... Posted by Hello

Entrenadores...modelo a seguir?


Considero que una de las situaciones que dejamos a un lado o le restamos importancia es el enorme papel que desempeña un entrenador en la vida de nuestros hijos.
A veces nos preocupamos más por el deporte mismo, por el horario de la práctica, por el equipo deportivo, por los compañeros que tendrá nuestro hijo, etc.; pero dejamos a un lado otro factor igual de importante que asegura una convivencia y aprendizaje óptimo: el entrenador.
He visto como muchos padres de familia se ciegan ante impresionantes historias laborales (curriculums) y, prácticamente, abandonan a sus hijos a su suerte con el nuevo entrenador.
Con esto no quiero decir que no sea importante la experiencia y la preparación de ellos. Al contrario, además el estar siempre actualizándose y adquiriendo nuevos conocimientos hace posible que nos brinden lo mejor de si en cada práctica.

Pero lo que llamo a reflexión por parte de los padres de familia es sobre que ejemplo deseamos que nuestros hijos sigan.

Debemos recordar que en las categorías infantiles y predominantemente en las juveniles, los deportistas están en pleno desarrollo tanto físico como psicológico. Esta etapa se le conoce como adolescencia que va desde alrededor de los 12 o 13 años hasta alrededor de los 18 o 19 años. Una de las características del desarrollo psicológico es que los jóvenes buscan figuras fuera del contexto familiar donde puedan depositar sus afectos y a las que puedan emular con sus acciones, formas de pensar, actitudes, etc. Así mismo, para enfatizar aun mas éste tema, los deportistas competitivos o de alto rendimiento suelen pasar la mayoría del día con su entrenador y practicando que con su familia o en la escuela; sin dejar a un lado los que ya viajan con ellos con el fin de participar en numerosos eventos deportivos a lo largo del año.
Con todo éste tiempo que pasan juntos aunado a la etapa formativa que están viviendo, nuestros hijos son sumamente vulnerables en la adquisición e imitación de nuevas maneras de conducirse y de pensar.
Así que mi gran preocupación es sobre que tipo de nuevas conductas nuestros hijos adquirirán durante este proceso. Recordemos que ellos están aprendiendo a enfrentarse a la vida y nosotros les estamos brindando diversas herramientas para que las prueben y las usen en un futuro...pero que pasa cuando sus modelos a seguir (aún siendo nosotros mismos) actúan de una forma considerada por la mayoría como poco conveniente?
Les recomiendo que no se dejen llevar nada más por los logros profesionales de algunos entrenadores, sino que vayan más allá y entablen respetuosas conversaciones con ellos para conocerlos mejor, indaguen las prioridades que defienden, escuchen como se expresan de los demás jóvenes deportistas, de sus familias y de los demás compañeros entrenadores, que actividades de esparcimiento recomiendan a sus pupilos, que hábitos alimenticios tienen, etc. Recuerden que nuestros hijos llegarán a copiar muchas cosas de los demás y de la gente significativa para ellos y aquí el entrenador es sumamente importante. Ellos son los que conviven con nuestros pequeños, quienes les transmiten amor al deporte, al estudio, a la familia, honestidad en la práctica deportiva, responsabilidad y disciplina, respeto hacia los otros competidores y hacia el esfuerzo demostrado por todos y cada uno de los participantes, respeto hacia las figuras de autoridad y se les enseña a una forma sana de expresión de opiniones, etc.
Señores padres de familia, así como existen entrenadores que difieren en ideología y valores a la gran mayoría de nosotros, tenemos la enorme suerte de contar con férreos maestros que día a día se sacrifican para ver sonreír a nuestros niños y participar en sus diarios logros deportivos.
Les mencionaba que debíamos ser precavidos al elegir el entrenador para nuestros hijo, que necesitamos estar al pendiente de su cotidiana convivencia y de los hábitos que los nuestros van adquiriendo con el paso del tiempo.
Pero así como les invité a ser precavidos, les invito a ser perceptivos en cuanto a aquellas personas entregadas a su profesión y con una gran calidad humana sabiendo que son depositarios de la confianza de los padres y forjadores, en gran parte, del destino de nuestros hijos.
Así que reconozcamos el papel crucial del entrenador en el desarrollo integral de nuestros hijos y fomentemos la personalidad que queramos que nuestros hijos reúnan para su adultez.
Publicado en: www.asdeporte.com

lunes, 25 de octubre de 2004


Una expresión de belleza sin igual por Bretn y Kendra en Smart Ones Skate America Posted by Hello

martes, 5 de octubre de 2004

Crees que puedes ?



He escuchado muchas veces ésta pregunta, esta súplica disfrazada de los padres o enunciado en forma de mofa hacia algún jugador o competidor.
Ahora con mis compañeros se tocó el tema acerca de la actitud que tienen algunos tenistas cuando están en la cancha, y más específico, aquellos tenistas ya sea argentinos o chilenos.
He conocido algunos y me he quedado con un recuerdo de gente tenaz, entregada, disciplinada, responsable y conocedora de sus limitaciones así como de sus grandes alcances.
Admiramos a competidores con estas cualidades, hablamos de ellos y queremos que nuestro pequeño los imite en actitud hacia las adversidades.
Pero ayer cuando estaba trabajando con un grupo de jóvenes tenistas ellos mismos me dieron una clara idea acerca de este importante tema.
Es verdad que conocen gente destacada de otras nacionalidades que los emocionan y muestran cómo afrontar retos y vencerlos. Pero mis tenistas me dijeron algo muy muy importante: “... entre nosotros también conocemos chavos y chavas así !”.
Eso quiere decir que sin ir más lejos, podemos encauzar los ideales de nuestro hijo y sus modelos a seguir hacia aquellos pocos compañeros que cuentan con la actitud que deseamos aprenda el nuestro.
Desgraciadamente no son muchos, pero los hay. A veces como papás andamos buscando ídolos fuera del medio ambiente de nuestro hijo para que éste llegue a imitarlos, a seguir sus pasos, etc. Pero ayer mis tenistas me enseñaron que también hay grandes ídolos muy cerca de nosotros y mucho más accesibles que los demás. Si ustedes le preguntan a su hijo si conoce a algún compañero que “se muera” en la cancha en cada entrenamiento o partido, seguro recuerda al menos a uno.
Nuestros jóvenes tenistas saben quien cuenta con esa actitud de garra y entrega en cada actividad y la saben reconocer de sus compañeros.
Porque no reforzar en nuestro hijo el reconocimiento y la admiración por esa forma de vivir y le enseñamos que el también puede adquirirla. Que él también puede aprender a luchar hasta el final ya que el partido no acaba hasta que cae la última bola.
Y algo igualmente importante...prediquemos con el ejemplo..enseñémosle que nosotros también actuamos con ésa filosofía que tanto nos gusta, que sabemos luchar siempre y levantarnos de las complicaciones y sabemos seguir adelante.
En fin tenemos a la mano ejemplos adecuados para nuestro hijo en edad, nivel socioeconómico y cultural que podemos utilizar para fomentar una actitud adecuada no solo para afrontar un partido de tenis...si no para saber afrontar cualquier obstáculo que se le presente en la vida.
Vayamos formando competidores que otras personas también lleguen a admirar fuera de nuestras fronteras!
Publicado en: Tennis Mexicano

lunes, 4 de octubre de 2004


Mi admiración y respeto para cada uno de los atletas que asistieron a los Juegos Paralímpicos... Posted by Hello

jueves, 2 de septiembre de 2004


huelum, huelum!

La Magia del Nacional


Quise titular a este articulo con esta frase ya que desde que la escuche por primera vez me ha dejado un buen sabor de boca.

Recientemente tuve la fortuna de haber trabajado con la selección de 3era. Fuerza de boliche de la Asociación del Politécnico (ABIPN) con miras al nacional que se celebró a finales de julio(2002) y de la cual fuimos anfitriones.
En la última de mis intervenciones con el grupo, uno de los competidores participó haciéndonos ver que él ansiaba que comenzara el evento ya que gustaba de la única e inigualable sensación de “la Magia del Nacional”.
Fue en este momento que comprendí lo que para él significaba el evento y la importancia que tenía que les compartiera este sentimiento.

Usualmente, por desgracia, escuchamos a los competidores temerosos de que se avecine el evento competitivo, sufriendo innumerables manifestaciones físicas y psicológicas relacionadas con la ansiedad pre-competitiva.
Podemos citar, por ejemplo: pensamientos negativos, derrotistas, dudando inclusive de su preparación y de su propia capacidad deportiva, presagian finales catastróficos, se muestran sumamente irritables, distraídos e intolerantes, fácilmente encaran discusiones, etc.
Por otra parte podemos citar en las manifestaciones físicas algunas como: trastornos en la alimentación, trastornos del sueño, resequedad en boca, palpitaciones, calambres, tropezones frecuentes, gripas, erupciones cutáneas, etc.
Y estas son solo algunas de las reacciones de todo nuestro organismo a la ansiedad descontrolada que representa para nosotros la competencia próxima. Nuestro cuerpo demuestra lo que sentimos o padecemos.

Cuando le pedí a Francisco (autor de la frase) que nos explicara a todos lo que para él significaba el próximo evento nos inundó de sentimientos y pensamientos frescos, inteligentes, audaces y valientes. El nos dijo que para él ya era una victoria el haber quedado dentro de la selección y que ahora el nacional era un placer jugarlo. Dijo tener muchas ganas de participar y derribar pinos.
De trabajar cada tiro en las mesas y poner más del 100% para aprender a leerlas (conocer el aceitado y las condiciones de la pista para planear e ir haciendo ajustes a los tiros) lo más rápidamente posible. Dijo tener muchas ganas de conocer ya a sus adversarios y dejar en las mesas todo lo que había entrenado y sabía. Pero otro comentario igualmente importante fue cuando dijo, que así como participaría buscando la excelencia, sabía que cualquier evento de alguna u otra forma presentaba situaciones adversas y que también quería enfrentarlas y superarlas. Y que así como había competidores que eran sus amigos había competidores que no le agradaban y tenía que tolerarlos. Así que ha todo este abanico de vivencias en una sola semana y por un par de horas al día lo denominó “la magia del nacional” y que, indudablemente, no se la perdería.

Pude captar el asombro de algunos de los presentes ante tal afirmación. Y creo entender el porque a muchos nos cuesta trabajo aprender a ver la competencia desde otro ángulo.

Estamos acostumbrados (la mayoría) a sufrir la competencia, a padecerla y darle un significado emotivo fuera de la realidad. Cuando ponemos en juego nuestros valores, nuestra persona e identidad en cada participación deportiva estamos poniéndonos en una situación muy frágil que nos acarreará conflictos, dudas, miedos, etc. Pero si aprendemos a otorgarle a la competencia otro significado creo, vehemente, que podemos comenzar a disfrutarla.

Busquemos entender el evento deportivo como una vivencia en la cual nos conoceremos más, en la cual pondremos en práctica toda nuestra preparación física, nuestras habilidades técnicas, tácticas y psicológicas. Pensemos que es una oportunidad única para aprender a luchar y a no darnos por vencidos.
Recordemos que de la manera en la que enfrentemos estos retos, estaremos enfrentando muchos más en nuestra vida adulta.
Y algo más que es sumamente importante, apreciemos el momento pues cada evento es único y no se vuelven a repetir las mismas circunstancias.
Así que los invito a aprender a disfrutar, desde los entrenamientos diarios, hasta aprender a disfrutar la preparación de la competencia y a ella misma, con todos sus bemoles.
Los invito a buscar, en sus particulares disciplinas deportivas, “la Magia del Nacional”.
Publicado en: www.asdeporte.com

lunes, 30 de agosto de 2004

Nuestra Belem Posted by Hello

Que me dejaron éstas Olimpiadas...

He escuchado diversas opiniones y críticas acerca del desempeño de nuestros atletas en los pasados Juegos Olímpicos celebrados en Atenas, Grecia.
Estas han ido desde la admiración y respeto hasta las más profunda molestia y decepción.
Realmente me he asombrado ante los extremos que mucha gente a mi alrededor maneja al hablar sobre nuestra selección olímpica.
A decir verdad, cuando empecé a ver los resultados de nuestros atletas, sentí muchas de las emociones que tantos estaban experimentando. Pero recordando cual es mi profesión, traté de situarme en una posición más objetiva (si es que se puede), e investigué un poco más a fondo en diversos medios sobre lo que acontecía en algunos deportes y en sus ambientes próximos.
Claro que no pude obtener mucha información que me hubiera ayudado pero lo que fui escuchando y leyendo bastó.
La gran mayoría de los deportistas que se presentan o actúan en un evento competitivo intentarán luchar y salir airosos del compromiso que esto conlleva.
Pero no basta la actitud de nuestro atleta ya que en los instantes previos al principio de su participación, lo que cuenta también es su preparación física, técnica, táctica, psicológica, su fogueo y la armonía que hubiese existido a su alrededor entre el equipo multidisciplinario que lo apoya y su familia inmediata.
Muchos de nuestros seleccionados arribaron a tierras griegas sin el fogueo indispensable para tan magnífico evento; otros arribaron faltos de preparación física o técnica, otros tanto sin la preparación mental necesaria y muchos más arribaron sin la actitud adecuada siquiera para pelear algún puesto decoroso.
Pero hubo otros que aún careciendo de algunos detalles indispensables...se entregaron completamente al compromiso que tenían frente a ellos y con ellos mismos.
No busco de ninguna manera eximir de responsabilidad a dirigentes, entrenadores o a los mismos atletas y tampoco busco justificar la actuación de otros tantos.

Lo que anhelo es que nuestros jóvenes puedan criticar y admirar las buenas actuaciones; que sean concientes de que las estadísticas cuentan en cuanto a aproximaciones de logros y que los milagros no existen en el deporte. Que solo existe el trabajo, entrega, sacrificio, dedicación y garra.
No nos dejemos llevar por la falta de información o por las críticas de algunos cuantos. Analicemos fríamente los hechos y si, desaprobemos a aquellos que ni siquiera se hayan entregado en su participación, pero también, creo justo, regalar un aplauso y nuestra admiración a aquellos cuantos que entregaron su corazón y entusiasmo por ellos mismos, por su deporte y por nuestro país.
Publicado en: TennisLife en Español

viernes, 20 de agosto de 2004


caption Posted by Hello

Contra quien juega nuestro hijo ?




Generalmente, hablando de tenis, cuando nuestro hijo tiene partido nos preocupamos por saber contra quien le toca jugar en la siguiente ronda del draw.
Cuando ya nos enteramos del nombre del contrincante, solemos discutir con nuestro hijo acerca de cómo vimos a este pequeño jugar el último torneo, recordamos contra quien jugó, y si perdió o ganó partidos intensos.
Ofrecemos nuestro punto de vista sobre las habilidades tenísticas del oponente, si antes tuvimos la “suerte” de verlo jugar, contamos con mas recursos sobre tenis y su técnica para poder, con toda confianza y seguridad, hablarle a nuestro pequeño tenista sobre lo que nosotros apreciamos de lo que será su próximo encuentro.
Básicamente es así como vamos preparando a nuestro hijo para su siguiente match, discutiendo ambos sobre sus posibilidades en el terreno de juego, sobre las debilidades del otro tenista, muchas veces hasta podemos predecir un marcador, una actitud o un comportamiento del oponente y de sus papas, a veces platicamos sobre la necesidad de buscar un árbitro para su partido, etc.
Pero que sucede cuando nosotros, como padres de familia, no somos tan conocedores del tenis como para poder hacer una crítica adecuada del tipo de juego de los demás y del de nuestro hijo ? Que pasa cuando solamente hemos sido espectadores en entrenamientos y en torneos y no contamos con la indispensable preparación de un entrenador, para así, poder evaluar el tenis de los demás y el de nuestro propio hijo?
Que pasa cuando solamente somos jugadores sociales o competitivos de algún evento de adultos y desconocemos la competitividad en todos sus aspectos de los infantiles y juveniles?
Siempre me ha llamado mucho la atención, en más de 10 años de ver buen tenis, cuando escucho a padres de familia predecir la actuación de su hijo en base a un oponente en particular. Es más he sido testigo cuando en draws de eventos nacionales, sin haber comenzado el propio torneo, los papas ya han hecho sus cálculos y han llevado a su hijo de manera ficticia a jugar cuartos o semis del torneo...y todo porque ya saben como juegan los demás y conocen cual será el resultado.
Déjenme decirles que al “preparar” a su pequeño tenista (y sobre todo antes del partido) sobre el posible resultado, sobre su técnica, sobre la estrategia a seguir, etc., éste entra a la cancha ya con una presión extra. No nos olvidemos que también, con el afán de apoyar y orientar muchas veces comentamos a la hora de la comida, en el coche o en la reunión familiar, que el próximo partido será fácil, que el oponente no juega a su nivel y que él debe de ganar. Se imaginan que siente nuestro hijo cuando el resultado no es favorable y todo indicaba que sería lo contrario, que para ustedes el partido ya estaba resuelto? Y al contrario imagínense las expectativas de nuestro hijo si le comentamos que su próximo contrincante es muy fuerte, que es difícil en la cancha, que a lo mejor termina el torneo hasta esa ronda y que le tocó “mala suerte” pues jugará contra un sembrado.
Porfavor analicemos lo que platicaremos con nuestro hijo y busquemos la mejor manera de lograr transmitirle apoyo, comprensión, empatía y un profundo respeto.
Podemos dialogar antes del partido sobre la táctica que nuestro propio hijo eligió junto con su entrenador, podemos recordarle que esperamos todo su esfuerzo en la cancha, todo el respeto hacia su contrario y que lo apoyamos y que lo amamos sin importar el resultado.
O no es así?
Publicado en: www.atdf.com

martes, 17 de agosto de 2004

Las Olimpiadas




En esta época tan especial llena de publicidad sobre las olimpiadas, podemos aprovechar el momento para inducir a nuestro hijo en la practica de algún deporte o en guiarlo a que se comprometa mas seriamente en el que practica actualmente.
Los atletas que estamos viendo realizar grandes hazañas se convierten en héroes a la vista de nuestro pequeño y también, de los no tan pequeños.
Saldrán a la luz pública innumerables historias acerca del esfuerzo, sacrifico, valor, unidad familiar, humildad, coraje, determinación, garra, compañerismo, fair-play y respeto entre muchos otros.
Todos estos valores y formas de vida son indispensables para un crecimiento integral con vistas hacia una adultez mas sana.
Recuerdo con mucho agrado como mi hijo se identifica en cada evento de este tipo con distintos atletas de varios deportes y así tuve opciones de todo tipo para encauzar sus inquietudes por emular a los grandes que salían en la tv.
Claro que recorrimos algunos deportes que van desde la natación, hasta el soccer pasando por el tenis. Pero el resultado valió la pena... el deporte ha sido parte importante de nuestras vidas.
Ayudémosle a nuestro hijo a elegir una disciplina deportiva en la cual nos comprometamos también a apoyarlo con asistencia, puntualidad, respeto al entrenador, etc.
Y si ya asiste a clases continuemos fomentando su motivación siendo participes en su actividad.
Ahora bien, a parte de propiciar la inclusión y permanencia en la practica deportiva, podemos utilizar los valores arriba mencionados para continuar fomentándolos no solo en el deporte si no en la vida familiar.
Además podemos seguir enseñándole a nuestro hijo que la gran mayoría de los atletas que estamos viendo en la tv son personas muy parecidas a nosotros, con metas bien definidas y grandes anhelos y que gran parte de su triunfo ha sido gracias a su entrega y dedicación. Podemos enseñare con valiosos ejemplos la satisfacción del logro... pero también la satisfacción del esfuerzo y el amor a lo que uno hace.
Publicado en: Boletin semanal del Club Alemán de México.